Complicidad
Nadie decía te quiero como lo hacías tú y fueron pocas o tal vez ninguna las veces que lo escuche saliendo de tus labios en un susurro eterno susurro y sin embargo tu cuerpo entero lo gritaba mientras me abrazabas cuando te sorprendía mirándome en silencio cuando rozabas mi mano con la tuya cuando tus labios se volvían uno con los míos. Es cierto que a veces un sentimiento se dice mejor cuando se traduce en acciones y silencios cómplices. Complicidad - Alejandro Palma