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Mostrando entradas de septiembre, 2015

y sin embargo

Que vergüenza señores, que vergüenza mirar en las noticias y no saber nada sobre las personas de las portadas o de quienes hablan en los programas de media mañana carecer de curiosidad por los famosos y sentir desencanto por la política vergüenza de ni siquiera mirar noticias y no encender jamás esa pantalla oscura no tener tarjetas de crédito ni deudas con las casas comerciales caminar por la calle y no tener un automovil propio que vergüenza esa falta de compromiso con el sistema alejado de las enseñanzas de consumo y renovar las apariencias que con tanto esfuerzo nos han inculcado para ser mejores ciudadanos e hijos del modelo de mercado y sin embargo ser simplemente admirador del cielo pensador autónomo apátrida conciente responsable comprometido con la vida - y sin embargo - Alejandro Palma   

Cambio de estación

Llegó la primavera Y los días se hicieron más largos Y las noches más largas Y las horas más largas Y la soledad más larga Llegó la primavera Y no nos trajo más amor Sino que todo acabó Una noche cálida de luna llena Game over C’est fini Fin del camino Y me quedé triste Aunque ahora que lo pienso Siempre estoy triste Pero además ahora estoy solo Cambio de estación Cambio de vida Cambio de pena No todo florece en primavera Algunas cosas se marchitan

Reflexiones de Primavera

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Primavera parece ser la estación del año que más se celebra porque se asocia a un cambio que promueve el renacimiento, la vida, el florecer en múltiples aspectos. Y sin embargo también es una estación que tiene un lado negativo: aumentan las alergias, los suicidios, muchas ansiedades y penas. ¿Cómo es que se da esta gran dicotomía? Tengo una noción simple de todo esto: las ausencias se acentúan, se agudizan, se vuelven un poco más grandes. Nuestra cultura y estilo de vida nos impone un poco más de esto y nosotros nos convencemos de ello: la primavera es la antesala del verano, debemos ponernos en forma y vernos mejor, ser más felices, unirnos más, etc... Nos cuesta comprender los ciclos naturales que año a año vivimos como personas, como seres individuales, pero que no llegamos a incorporar como parte de nosotros y que no necesariamente coinciden con los ciclos de la tierra. ¿Y si todo florece, por qué yo no? parecemos preguntarnos a veces. Mafalda y su reflexión sobre la Primavera

La plaza donde los árboles hacian yoga

Mientras caminaba por el parque al amanecer me encontré con una plaza donde los árboles hacían yoga. Sus movimientos eran lentos y llenos de gracia. Me entretuve mirando a los que mecían las copas en círculo. Sus troncos crujían con cada vaivén en una coreografía perfecta. Más allá algunos se dejaban caer y se quedaban inmóviles con las raíces asomadas en perfecta posición horizontal. Los más elásticos levantaban sus troncos formando un arco perfecto. Pero los del fondo me llenaron de asombro. Sus ramas fueron escarbando de manera pausada, adentrándose en las profundidades de la tierra, mientras en perfecto equilibrio elevaron las raíces al cielo buscando los tibios rayos de un sol que aparecía tras la montaña.